Al menos somos dos

Carta al director publicada en el diario Las Últimas Noticias 3/Julio/2006

Que vuelva la escuela normal

Quienes tuvimos la suerte de estudiar la enseñanza primaria en los años 40 y 50 fuimos privilegiados, porque nuestros profesores se formaron en escuelas normales. El profesor normalista es hoy una especie en extinción. Si no hacemos algo por continuar con su especie estamos farreándonos la manera de mejorar la educación. Hoy se habla de educación secundaria cómo si los problemas de educación se iniciaran en esta etapa. Pero los niños de los últimos cursos de la enseñanza básica aún no saben leer. ¿Qué podrán hacer más adelante? El profesor normalista es un personaje que estudió para enseñar porque quiso, porque tenía vocación. La escuela normal tenía una mística que le permitía entregarse a sus alumnos y a su escuela. Sé de los sacrificios de los profesores rurales para realizar su cometido: para obtener sus insumos muchas veces tuvieron que cultivar la tierra y criar sus propios animalitos. ¿Por qué no reactivar las escuelas normales? Así como existen liceos técnicos, cuyos egresados pueden acceder a la enseñanza universitaria también los normalistas podrán hacerlo. Pónganles dos años más de formación, pero así volveremos a tener profesores de calidad en la enseñanza básica y los problemas de la media se habrán minimizado. Esto no lo pide un profesor normalista, lo pide un ingeniero metalurgista, formado en la enseñanza básica por normalistas, que compitió con los normalistas de la escuela normal Rural Experimental de Victoria, deportiva y sanamente, por el Liceo Superior de Hombres. Aún quedan profesores normalistas en ejercicio para reconstruir las escuelas normales.

Luis Rodríguez Sanhueza
3.789.816-3

Referencia:Cartas al Director LUN